Crisis = Oportunidad: ¿Cómo cuidar de mis empleados en tiempos de crisis?

Hoy en día, las organizaciones sienten una gran presión en todos los aspectos de sus operaciones, pero hay un tema primordial y común entre todas ellas (independientemente del sector o mercado al que pertenezcan): el Capital Humano.

En el idioma japonés, existe la palabra crisis 危機 kiki, la cual está compuesta por los caracteres 危= peligro y 機= oportunidad. Los japoneses consideran que siempre hay que buscar formas de sacar algún beneficio ante las situaciones dificultosas. En este sentido, en tiempos de crisis, para aquellas organizaciones que confían en el conocimiento y la pasión de su gente, cuidarlos y conservarlos debería ser una parte crucial de la recuperación organizacional.

Pero, ¿qué significa esto?

Lo primero y más importante es la salud y seguridad de su capital humano. Esta es una prioridad bajo cualquier circunstancia, pero con la situación mundial actual, ha adquirido una nueva urgencia. Mantener a los empleados seguros depende de mucho más que solo cambios operativos; requiere un cambio de mentalidad.

Ya que es primordial contar con liderazgo abierto y flexible, un flujo frecuente de comunicación, cargas de trabajo cuantitativas y cualitativas acorde a las capacidades de cada uno de los trabajadores que puedan coadyuvar a que los empleados no sólo tenga un estilo de vida mejor, si no que también realicen su trabajo en las mejores condiciones y que los resultados obtenidos beneficien a la organización y sus objetivos (entre otros aspectos), los factores psicosociales laborales son críticos.

A continuación algunas ideas para cuidar de tu equipo en tiempos de crisis:

1. Los canales de comunicación proactivos y bidireccionales ayudan que los empleados se sientan escuchados y apoyados. Es un momento incierto, por lo que es importante ser abierto acerca de cómo su empresa gestiona y seguirá gestionando el impacto de la pandemia una vez que se reanuden las labores presenciales, y así, minimizar la incertidumbre tanto como sea posible. Hacerlos partícipes de este proceso hará que su confianza y compromiso mejoren.

2. En la medida de lo posible, permitir el trabajo remoto (home office) a los empleados que les sea posible. Evitar estar expuestos a las condiciones desfavorables del trabajo pre-pandemia, como el desplazamiento al lugar de trabajo, o a nuevas condiciones percibidas como riesgo (como el miedo a un brote nuevo del virus) puede ayudar mucho a reducir el estrés en los empleados.

3. Continuar con la filosofía de la empresa, a pesar de las nuevas e inusuales condiciones de trabajo, jugará un papel importante en la definición y muy probablemente, redefinición de esta experiencia para los empleados.

4. Los líderes organizacionales pueden ser un sistema de apoyo vital para las personas durante este tiempo. Por lo que, es importante mantenerse en contacto y retroalimentar a los colegas. A menudo, que los empleados sepan que están haciendo un buen trabajo, o inclusive, conocer sus áreas de oportunidad, es una excelente herramienta para que sientan que su trabajo es valorado y se sientan motivados y orgullosos de la contribución que están haciendo.

5. Al mismo tiempo, es importante vigilar el negocio y los objetivos de la organización como siempre. Si bien muchos empleados se han visto obligados a adaptarse a nuevos roles o cambiar la forma en que trabajan, es importante que sigan viendo un futuro en su organización. Esto significa continuar apoyando sus aspiraciones profesionales a través de un programa de reconocimiento y recompensa, ofreciendo capacitaciones, certificaciones, correos de agradecimiento, bonos, o cualquier esquema de incentivos que los mantengan motivados y comprometidos con la organización.

Recordemos que es probable que en un futuro las empresas serán juzgadas sobre los esfuerzos que realizaron para manejar esta pandemia y sus consecuencias, sobretodo aquellos esfuerzos orientados a sus empleados. Por lo tanto, es importante actuar ahora de una manera en la que se pueda estar orgulloso más adelante. Y aunque nadie sabe exactamente cómo será la nueva normalidad, las ventajas o desventajas que traerá consigo, lo que sí sabemos, una vez que el mundo comience a recuperarse, es que un capital humano bien cuidado contribuirá a garantizar que su empresa mantenga su lugar en el mundo de mañana.